Leonardo
da Vinci (1452-1519), frecuentemente
descrito como un arquetipo y símbolo del hombre del Renacimiento, genio
universal además de filósofo humanista cuya curiosidad infinita sólo puede ser
equiparable a su capacidad inventiva. Es considerado como uno de los más
grandes pintores de todos los tiempos.
Da Vinci tardó siete
años en finalizar su obra titulada "La Ultima Cena". Seleccionó a un
joven como modelo para pintar la figura de Jesús y dejó para el final a aquel
que representaría a Judas.Su demora debió a que no hallaba un ser que
reflejara la maldad, la traición, el vicio. Finalmente, lo encontró en una
prisión.
Cuando la obra estuvo terminada y salían del recinto el prisionero se soltó y corrió hacia Leonardo gritando: -¡Obsérvame! ¿No reconoces quién soy? Da Vinci lo miró y respondió: -Nunca te había visto en mi vida, hasta aquella tarde en el calabozo de Roma. Llorando y pidiendo perdón a Dios el reo le dijo: -"Maestro, yo soy aquel joven que usted escogió para representar a Jesús en este mismo cuadro".
Cuando la obra estuvo terminada y salían del recinto el prisionero se soltó y corrió hacia Leonardo gritando: -¡Obsérvame! ¿No reconoces quién soy? Da Vinci lo miró y respondió: -Nunca te había visto en mi vida, hasta aquella tarde en el calabozo de Roma. Llorando y pidiendo perdón a Dios el reo le dijo: -"Maestro, yo soy aquel joven que usted escogió para representar a Jesús en este mismo cuadro".
“La simplicidad es la máxima satisfacción ”
Reflexionando al respecto twittié:
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